Fallo a favor
del acuerdo.
El juez federal Jorge Urso desestimó
la denuncia que habían presentado
en marzo los fiscales Eduardo Freiler
y Federico Delgado, en la que solicitaban
que se investigara el contrato de
la empresa argentina INVAP con el
organismo nuclear australiano ANSTO
por presunta comisión de delitos
de acción pública.
Urso tomó la decisión
el 31 de octubre, aunque recién
ayer fue informada por INVAP, que
ganó una licitación
para construirle un reactor nuclear
a Australia en junio de 2000. Según
la empresa, el juez consideró
que puede guardarse la confidencialidad
del contrato en cuanto está
resguardado en el artículo
19 de la Constitución.
Según INVAP, el juez aceptó
los argumentos de los doctores Carlos
Rívolo y Claudio Navas Rial,
a cargo de la fiscalía que
entendió en la causa. Y desestimó
la denuncia y ordenó "el
archivo de las actuaciones, por inexistencia
de delito".
El tema del reactor para Australia
generó una polémica
entre más de 160 organizaciones
ambientalistas y sociales de la Argentina
y los defensores de la exportación
de tecnología nuclear.
Los ecologistas se oponen a que a
cambio de la construcción del
reactor, la Argentina se haga cargo
de la importación de los residuos
radiactivos. En cambio, INVAP sostiene
que no se haría cargo de residuos
radiactivos sino de combustibles gastados,
por lo cual no violaría la
Constitución. Además,
argumenta que, de hacerse en el país,
el ingreso de esos combustibles sería
transitorio.
8 de noviembre de
2002
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