Jefes comunales
del departamento hicieron una denuncia
penal. Temen por la salud de la población.
Santa Fe. - Jefes comunales de localidades
del departamento Las Colonias presentaron
una demanda penal ante el Juzgado
de Circuito Nº 19 de Esperanza
por contaminación del arroyo
Las Prusianas y otros cursos de agua
que sufren gravísimos perjuicios
ambientales.
"El uso irracional de los recursos
naturales, sobre todo el fluvial,
está cobrando a toda la región
un excesivo precio: muerte por contaminación
con cromo; arroyos y lagunas inutilizados,
no sólo por la inexistencia
de la vida ictícola, sino también
por los signos evidentes de putrefacción
de las aguas", sostuvieron los
jefes comunales de Humboldt, Felicia,
Pilar, Nuevo Torino, Colonia Rivadavia
y Cavour ante a la "grave contaminación"
en los arroyos Las Prusianas, La Paloma,
Cañada de Flesia y Cululú.
En algunos casos, como en Las Prusianas,
no hay vida biológica desde
hace años".
"Paisajes otrora pintorescos
están hoy desolados y enfermedades
de origen inexplicable muestran una
realidad que, como responsables políticos
afectados, debemos denunciar",
sostuvieron los intendentes.
El jefe comunal de Humboldt, Germán
Alcides Kahlow, señaló
que además de la presentación
ante el juez Norberto Erni por violación
del código de faltas provincial,
que tiene como bien jurídico
protegido los ecosistemas y sanciona
la contaminación de los recursos
hídricos, se hicieron denuncias
ante Medio Ambiente de la provincia.
La presentación sostiene que
el origen de la contaminación
se focaliza en los efluentes de industrias
de Rafaela y Ataliva donde no existirían
controles y muchas de ellas no tienen
plantas procesadoras de residuos industriales.
El tema no es nuevo y agudiza los
conflictos por los procesos contaminantes
que tienen por epicentro a Rafaela
y Esperanza, aunque en esta última
la curtiembre Sadesa ya cuenta con
una planta de procesamiento de los
desechos industriales.
Lugares contaminados
Según la denuncia el problema
comienza en Rafaela, donde existe
un canal norte y un canal sur que
desembocan en los cursos de agua,
sobre los cuales se vuelcan desechos
y residuos considerados peligrosos
según la reciente ley de medio
ambiente. El canal norte, antes de
desembocar en Las Prusianas, transita
por la cañada de Flesia, con
lo que todos los productos contaminantes
vertidos en dicho canal desembocan
en el arroyo mencionado. Por su parte,
el canal sur desemboca directamente
en el arroyo Las Prusianas y éste
confluye en el Cululú, que
desagua en el río Salado. Según
la documentación, se constató
una importante mortandad de peces
("los últimos que quedaban
en esos arroyos") y está
muy afectada la flora y fauna que
toma contacto con el agua.
Los jefes comunales señalan
que se verificó el "permanente
volcado de líquidos putrefactos
que dejan a su paso un espeso manto
que cubre todo el agua", en ambos
canales. Sostienen que los habitantes
de estas localidades se sienten damnificados
y que "están sometidos
al peligro inminente de padecer enfermedades".
30 de setiembre de
2002
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