El 16 de septiembre de 1987, hace 18 años, se firmó en Montreal el afamado Protocolo, que pretendía implantar unas normativas con la que minimizar los elevados niveles de  emisión de contaminantes atmosféricos que destruían la capa de ozono, único filtro que dispone el Planeta ante la perniciosa, si es excesiva, radiación ultravioleta solar.

En este año 2005, el lema del Día Internacional para la Protección Mundial del Ozono será "Respeta la capa de ozono, sal al sol sin peligro", y aunque difícil, debemos intentar conseguirlo, a pesar de las ambiciosas pretensiones del mundo que genera el capital, a costa de lo que sea.

El pasado mes de Agosto, el agujero de la capa de ozono en la Antártica ya había empezado a observarse, y en estos días del mes de septiembre, la extensión del agujero alcanza los 22 millones de kilómetros cuadrados, según los expertos del Instituto Nacional de Meteorología de España. La mayor extensión promediada durante el periodo 1995 al 2003 para esta época del año.

¿Qué está pasando?. Con el Protocolo de Montreal se ha conseguido reducir el uso de determinados contaminantes que destruía el ozono estratosférico. El Bromuro que se usa para desinfección del suelo donde luego plantamos cultivos de primor, los famosos CFC que contiene cloro y flúor de uso habitual en gases de refrigeración de los frigoríficos y sistemas de climatización, y en "spray" de uso doméstico en desodorantes, colonias, antimosquitos, y otros que no llevan la etiqueta "NO DAÑA LA CAPA DE OZONO"

Hoy en día, al menos entre los países firmantes del indicado Protocolo, ya no deben fabricarse productos que contengan esos contaminantes, algo se ha logrado, pero no todo, pues en otros países en vías de desarrollo no llega el alcance de este acuerdo internacional, y la atmósfera lo sufre y el efecto pernicioso nos alcanza a todos a través de la dispersión de contaminantes a escala planetaria por efecto de los vientos, y de las reacciones físico químicas que se producen en la media y alta atmósfera, recordándonos que somos un pueblo global, al menos en lo que a la atmósfera se refiere, pues la contaminación de Asia, repercute en Latinoamérica, y viceversa.

La toma de decisiones sobre como proceder ante el problema que se nos avecina, corresponde a los políticos y juristas; controlar que no se produzcan sustancias que lo destruyan, es labor de empresarios honrados e inteligentes, de las fuerzas de seguridad y de las Administraciones ambientales; pero conocer su evolución a escala regional y planetaria es labor de los científicos especializados en esa materia, algunos de los cuales están en esos días reunidos en las instalaciones que el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) dispone en El Arenosillo, a escasos kilómetros de Mazagón (Huelva).

Desde el 9 al 18 de septiembre se ha celebrado en la Estación de Sondeos Atmosféricos del Centro de Experimentación "El Arenosillo",  la primera Campaña del Centro Regional Europeo para la intercomparación y calibración  de espectrofotómetros Brewer, instrumento destinado a la observación del contenido total de ozono y radiación ultravioleta solar. Simultáneamente se ha intercomparado  y calibrado la Red de Brewer distribuida por España, y que coordina el Instituto Nacional de Meteorología.

Ha sido la primera intercomparación combinada para ozono y ultravioleta, al haberse podido reunir en El Arenosillo los dos instrumentos patrones de ozono, (el de referencia mundial itinerante de Canadá "IOS" y el patrón del Centro Regional de Calibraciones para Europa "RBCC-E" del INM), así como el instrumento patrón itinerante del Centro Europeo de Referencia para la medida de radiación ultravioleta "ECUV".

Esta Campaña ha sido auspiciada por la Organización Meteorológica Mundial "OMM", ante la propuesta coordinada del INM y del INTA, y ha acogido a la mayor concentración de espectrofotómetros realizada hasta la fecha, un total de 15 instrumentos que, una vez calibrados y chequeados, han regresado a sus habituales puntos de observación para seguir su labor de vigilancia e información de la evolución del contenido de ozono y de radiación ultravioleta.

El Arenosillo inició su labor de observación del ozono atmosférico en el año 1980, y dispone actualmente de la serie de datos más larga de España, habiendo sido siendo reconocido como el Observatorio 213 de la Red Mundial de vigilancia de ozono, y acoge regularmente campañas de ámbito internacional para la calibración e intercomparación de instrumentos ópticos para la medida de ozono, radiación solar ultravioleta y aerosoles, gracias a la excelente climatología, fácil acceso, adecuada infraestructura y dotación instrumental que dispone para atender éste tipo de encuentros de tan importante trascendencia ambiental y social.

Numerosos esfuerzos de colectivos científicos y sociales se aúnan sistemáticamente para intentar conseguir un "mundo mejor", pero la ignorancia endémica del que no quiere saber y la interesada complacencia del que no quiere enseñar, propician que el agujero de ozono siga aumentando y que la radiación ultravioleta afecte nuestra salud generando canceres diversos, afecciones ópticas y mutaciones genéticas anómalas en las especies animales y vegetales que forman junto con nosotros, eso que se llama Biosfera.

No sé si la celebración del Día internacional del Ozono, servirá para que la clase política evalúe el cumplimiento de los acuerdos firmados en el Protocolo de Montreal, ni siquiera sé si se despertará la conciencia de los ciudadanos que, como usted, sufren las consecuencias de la disminución de la capa de ozono, pero lo que sí les aseguro es que los científicos seguiremos aportando nuestro granito de arena para informarles puntualmente.

Especial para barrameda.com.ar
Dr. Benito A. De la Morena
Jefe de la Estación de Sondeos Atmosféricos
El Arenosillo" (Huelva-España)
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