El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, calificó de extraordinaria la noticia de que la tasa anual de deforestación de la selva amazónica ha caído casi a la mitad, el mayor descenso desde que se empezaron a llevar registros hace 21 años.

Sin embargo, el mandatario brasileño dijo que era imperativo que todos aquellos involucrados en el asunto sigan trabajando juntos para evitar futuros contratiempos.

Los ambientalistas han advertido que el proceso de deforestación está lejos de haberse detenido.

Señalan a la crisis financiera global como una posible causa del descenso en la tasa de destrucción de la Amazonia.

Las más recientes imágenes de satélite muestran que cerca de 7.000 kilómetros cuadrados de bosque tropical fueron destruidos entre julio de 2008 y agosto de 2009, señaló el corresponsal de la BBC en Brasil, Gary Duffy.

Credenciales verdes

Según Duffy, el gobierno brasileño indudablemente tomará los más recientes datos como una manera de fortalecer sus credenciales verdes, justo antes de la cumbre de Copenhague sobre cambio climático, programada para diciembre.

En esa reunión, el gobierno brasileño muy probablemente mostrará sus esfuerzos para reducir la destrucción de la Amazonia como un elemento clave de su estrategia contra el cambio climático, adelantó el corresponsal.

El gobierno brasileño quiere ver una reducción del 80% en la tasa de deforestación para 2020.

Algunos ambientalistas han advertido, sin embargo, que una vez la crisis económica sea superada, la Amazonia podría volver a enfrentar una presión deforestadora, dijo Duffy.

Fuente: BBCMUNDO