Página 1 de 2 Las
arañas, pese a su mala reputación, se han revelado como una de las
piezas esenciales para la regeneración de la vida tras un incendio
forestal, ya que son unas de las primeras colonizadoras de estos
espacios arrasados y con su presencia permiten la llegada de nuevas
especies de animales y plantas.
Según indicó el director del departamento de Entomología de la Sociedad
de Ciencias Aranzadi, Alberto de Castro, "las arañas cumplen una
importante función" tras los incendios, porque aunque las especies
autóctonas, más especializadas, mueren por efecto de las llamas, nada
más apagarse los rescoldos del fuego "hay un batallón de arañas
oportunistas" que acuden al bosque quemado.
Tal es así que lo primero que, según De Castro, encontraron los
exploradores tras la formidable explosión del volcán Krakatoa, que en
1883 causó la devastación casi total de esta isla ubicada entre Java y
Sumatra, fue una araña.
Esto se debe a que los arácnidos "se dispersan muy bien" porque, aunque
no vuelan, hacen "parapente". Para ello, "suben a un lugar alto, donde
hay corrientes de aire, emiten un pequeño hilo de seda que hace las
veces de vela y planean con ella, desde unos metros, que es lo más
habitual, hasta cientos de kilómetros".
El biólogo donostiarra, que ha conseguido una beca postdoctoral para
estudiar la ecología de las arañas en los bosques templados de Kentucky
(EEUU), precisó que gracias a esta técnica las arañas colonizan islas y
otros lugares distantes o calcinados por el fuego.
De esta manera, llegan a los bosques arrasados a la vez que algunos
insectos muy poco exigentes que les sirven de comida, lo que les
permite prosperar y ser, a su vez, alimento de otros animales como
aves, reptiles, anfibios y pequeños mamíferos, que dispersan semillas y
polen, facilitando la entrada de nuevas especies en el ecosistema y su
recuperación.
"Las arañas no regeneran el bosque, pero contribuyen a que empiece la
vida de nuevo porque son muy resistentes y capaces de sobrevivir en
estos ambientes" tan difíciles, recalcó De Castro, quien explicó que
hasta el momento se han catalogado unas 38.000 especies de arácnidos en
todo el mundo (1.300 de ellas en España y Portugal), aunque se estima
que podrían existir hasta 200.000, porque cada año se descubren algunas
nuevas.
De Castro, que ha descubierto este año, por primera vez en nuestro
país, una rara especie de arácnido cuyo nombre científico es "Midia
Midas", destacó la importancia de las arañas como depredadoras de
insectos y su beneficio para el hombre y sus cosechas, ya que tienen un
importante papel en el control de plagas y evitan el uso de pesticidas,
además de servir como indicadores ecológicos de la correcta o
deficiente situación medioambiental de los ecosistemas.
El último comentario se muestra en esta página, los anteriores podrás leerlos en las páginas subsiguientes:
Sólo los usuarios registrados pueden escribir comentarios. Por favor valídate o regístrate. |
Las arañas, clave para la regeneración.. Escrito por Invitado el 2005-09-13 11:43:52 No me extraña que así sea. Culturas primitivas la asociaban con la idea de Madre Creadora, porque al igual que el creador, saca sus ideas de su ser. Así como la arañas sacan de su cuerpo sus telas. Muy buen artículo este. Realmente las culturas primitivas eran muy sabias. | |